Por Sarah Elisabeth Sawyer

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Libros de historia vivos.

Así es como el personal del Centro de Actividades para Mayores Ron Cross ve a los mayores que lo visitan a diario.

El centro de actividades, propiedad de la ciudad de Durant y gestionado por ella, colabora con OHAI (Oklahoma Healthy Aging Initiative), SONP (Southern Oklahoma Nutrition Program), RSVP (Retired Senior Volunteer Program of Bryan County) y muchas más organizaciones para atender a estos libros de historia viva.

En el centro hay veteranos que abarcan desde la guerra de Corea hasta la de Vietnam, y también personas mayores que son maestros de escuela jubilados, propietarios de negocios y mucho más. El centro de actividades ofrece comidas nutritivas diarias, juegos atractivos, programas de ejercicio, fiestas navideñas, reconocimientos a veteranos, venta de tacos indios, cantos gospel y karaoke semanal.

Con la edad de los mayores -la media es de 75 años y el mayor de 95- es un momento de su vida en el que no hacen falta filtros. Sólo conversaciones sinceras y auténticas, y risas.

Pero muchos de los mayores se enfrentan a situaciones financieras desesperadas en esta época de la vida. Al residir en una comunidad mayoritariamente agraria y haber trabajado en granjas y por dinero, su cheque de la Seguridad Social es mínimo. Muchos viven con entre 400 y 500 dólares al mes.

El Centro de Actividades para Mayores Ron Cross es una parte fundamental de sus vidas.

Para ampliar su servicio a los mayores, el centro ha creado una despensa de alimentos en la que los mayores pueden comprar una vez al mes un cargamento de víveres. Este proyecto se desarrolló gracias a una subvención de la Texoma Health Foundation.

Con los fondos, el centro instaló y abasteció estanterías, compró un nuevo congelador y mejoró el sistema eléctrico. El congelador permite al centro ofrecer a los ancianos una gran variedad de carnes y productos lácteos de marca. El resto de la subvención se destina al programa de nutrición SONP.

La despensa de alimentos también cuenta con el apoyo de la comunidad, incluida la tienda de comestibles local, Pruitt's Food, que ofreció una oferta benévola. Una vez al mes, el gerente de la tienda, Mike, transporta a pie palés de alimentos hasta el centro.

Los voluntarios desembalan y llenan las estanterías con alimentos por valor de 6.000 dólares. Muchos de los voluntarios son los propios mayores, que arriman el hombro para dejarlo todo listo para la compra.

Como centro comunitario, el centro de actividades proporciona a estos mayores el apoyo mental, físico y sanitario que necesitan.