Por Sarah Elisabeth Sawyer

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Cuando una escuela de una comunidad rural se incendió una noche, los alumnos tuvieron que ser reubicados durante el resto del curso. Además del trastorno, tuvieron que hacer frente a la gran pérdida de los libros de su biblioteca.

Para ayudar a llenar este vacío y mantener a los niños leyendo, Texoma Health Foundation y las empresas de la zona se asociaron con Save the Children para entregar un cargamento de libros en manos de los jóvenes lectores.

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"Nos centramos en estas comunidades rurales que son tan importantes para cualquier país, incluido Estados Unidos", afirma Claudia Vargas, Directora Estatal para Texas de la organización internacional Save the Children. "Estas comunidades nos alimentan, proporcionan madera y tantas otras cosas. No queremos que desaparezcan. No queremos que las familias tengan que abandonar las comunidades rurales porque no hay recursos para una educación de calidad."

Antes de venir a Texas, Claudia trabajó en Nueva York, un contraste con la zona rural en la que creció cerca de Ciudad de México. Entiende las dificultades a las que se enfrentan los jóvenes cuando su acceso a los recursos es limitado.

También aprecia el orgullo y la belleza de las comunidades rurales. Son elementos que quiere que se cuiden y preserven, y está haciendo su parte a través de Save the Children.

"Las comunidades rurales tienen entornos saludables en muchos sentidos, pero también carecen de infraestructuras o recursos suficientes", afirma Claudia. "Creo que llevar recursos a las comunidades de las zonas rurales de Estados Unidos es ayudar a estos niños y familias a sentir que pertenecen a ellas, que pueden empoderarse y tener una educación de calidad en sus comunidades."

Con libros donados por particulares y empresas como Scholastic y Amazon, Save the Children se ha asociado con THF para distribuir 10.394 libros (y seguimos sumando) a escuelas, programas y familias, en todos los lugares donde los adultos fomentan la educación y el desarrollo de los niños.

"Cuando un niño está expuesto a los libros de la forma adecuada, no necesita saber leer", dice Claudia. "Basta con que entiendan que existe este código llamado palabras, y que de alguna manera se corresponde con estas ilustraciones. Eso es la lectura temprana".

Conectar con los padres y ayudarles a entender que ellos son los primeros maestros de sus hijos es vital para la preparación escolar. La lectura temprana en casa se traduce en habilidades para la vida cuando el niño entra en la escuela.

"Los niños que reciben libros a una edad temprana necesitan que un adulto abra el libro y lo comparta con ellos", afirma. "La emoción que se comparte entre padres e hijos a través de un libro desarrolla sus habilidades sociales y emocionales. Además, conectan con los personajes de una historia. Es muy importante que entiendan que no están solos en el mundo con sus experiencias. El mundo se hace más grande a medida que nos exponemos a los libros".

Claudia espera llegar a más comunidades rurales a través de sus escuelas y hogares en los próximos años, a medida que crezca la asociación de Save the Children con THF.

"THF es rural, así que eso es muy importante para nosotros", dice Claudia. "Como no son un colegio, esta es una asociación no tradicional para nosotros. Pero cuando conocimos al personal de THF y nos dimos cuenta del alcance que tenían, y de este enorme espacio donde podían recibir un regalo y distribuirlo en su comunidad, fue increíble. Vimos que podíamos asociarnos con ellos y llegar a todos estos niños del norte de Texas y Oklahoma".